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Deportes | 29/06/2022
Por Juan Andrés García
Los mandamientos del entrenamiento deportivo
Desde el Gimnasio 360 y con ayuda de El Correo queremos brindarles a aquellos lectores curiosos las herramientas que creo necesarias para utilizar en su vida diaria, referidas al mundo del entrenamiento. No importa si sos un deportista recreativo, competitivo o de alto rendimiento, porque los principios básicos del entrenamiento son para todos aquellos a los que les gusta la actividad física.

Por esta sencilla razón decidí comenzar con una serie de artículos: el primero trataba sobre las características de cada tipo de deportista, y en este artículo actual, voy a hablar de los principios del entrenamiento deportivo en general. Son las reglas de oro para conseguir los objetivos que perseguimos.


Los principios enmarcan demasiados contenidos específicos y de difícil lectura por lo que voy a tratar de explicarlos de forma sencilla, así todos y todas pueden entender el “por qué” de cada cosa en sus entrenamientos.

Tener conciencia de que existen estos “mandamientos” a la hora de planificar sesiones de entrenamiento (con aval científico), permite seguir de forma coherente un programa específico para cada deporte y cada deportista. Así no caeremos en los inventos momentáneos o en el uso incorrecto de “todólogos” que suben videos a las redes sociales sin entender de qué hablan.


¿Qué son los principios del entrenamiento?

Son los criterios y reglas generales basados en distintos tipos de ciencias que sirven para perfeccionar el proceso del entrenamiento, con lo cual se determina el contenido, los métodos y la organización de este entrenamiento.

Estos principios se relacionan entre sí. Son muchos. Los que a mí me parecen más importantes son:

• Principio de lo consciente. Por el cual el deportista debe conocer por qué y para qué entrena.

• Principio de individualización. Postula que cada persona responde de forma diferente al mismo entrenamiento. Hay razones genéticas, nutricionales, ambientales, motivación, nivel de condición, etc.

• Principio de variedad. Todo entrenamiento debe producir una variación en los estímulos, no pueden ser siempre los mismos. Cada “X” tiempo se deben alterar, ya que si son reiterativos producen adaptación en nuestro organismo y no hay progreso.

• Principio de la progresión gradual (tal vez el más importante). Consiste en la elevación escalonada de las cargas del entrenamiento, el aumento de la intensidad y/o del volumen. No graduar trae como consecuencia un desentrenamiento y posibles lesiones a corto y mediano plazo.

• Principio del desarrollo multilateral. Busca el perfeccionamiento del máximo número de cualidades, así el deportista tendrá una gran riqueza de movimientos.

• Principio del calentamiento y vuelta a la calma (otro fundamental). Es el calentamiento previo a cualquier actividad física para aumentar la temperatura corporal, ritmo respiratorio, frecuencia cardiaca y prevención de lesiones. Finalmente volver a la clama para la recuperación. 

• Y para ir cerrando: principio de entrenamiento a largo plazo. Nada se hace en un día y en nuestro cuerpo, tampoco. Acelerar el proceso de entrenamiento suele desembocar en fracaso físico y mental. Entrenar primero en forma general y luego poco a poco la especialización.

Esto es un resumen en el que todo entrenador o preparador físico se debe basar. Si te gusta armar tus propios entrenamientos estas “leyes” te pueden servir para mejorar en tu performance física.

Periodista/Fuente: Por Juan Andrés García (Profesor Nacional de Educación Física)
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