Desde Lafayatte, Estados Unidos (donde reside desde febrero de 2020), la reconocida escritora y embajadora firmatense a través de sus novelas, charló con los periodistas de la Cooperativa, Estefanía Gutiérrez y Mariano Carreras, recordando cómo comenzó la columna Mam@ 2.0 que tenía espacio en El Correo, y contó las distintas experiencias por las que atravesó al realizarla (Entrevista a Mariela: https://bit.ly/2BJ8I2g).  

Por otra parte, cabe mencionar que en tiempos de pandemia, Mariela reeditó su novela Una  Lucrecia, un libro que narra la violencia de género en primera persona.

La reedición se encuentra disponible en las principales librerías del país y de manera digital desde septiembre de 2020, y hoy en día, a través de reseñas por sus colegas y lectores de distintas lugares de latinoamerica, continúa exparciendose y llegando cada vez a más hogares bajo el sello editorial de Vera Romántica.

#UnaLucrecia

“#Una Lucrecia es una novela que tenía terminada antes de que se presentara Primaveras para Elias (2016). Sucedió que el proceso de escribirla había sido tan intenso que la verdad no supe qué hacer con la novela y quedó ahí”, señaló la autora en comunicación con El Correo previo al lanzamiento a inicios de septiembre de 2020.

“Un 3 de enero de 2017 estaba sentada en casa y escucho que durante las primeras 72 horas del día habían asesinado a tres mujeres en Luján de Cuyo, Mendoza, me impactó tanto esa noticia y me acordé que tenía esta novela dando vueltas por ahí. La verdad me produjo mucha impotencia, enojo y ganas de hacer algo, y ese mismo día compartí (en Facebook) esa sensación que tenía y les dije que iba a empezar a compartir inicialmente un capítulo por semana y me sorprendió muchísimo la respuesta. Publiqué el primer capítulo y se generó un debate tan interesante que al segundo día publiqué el segundo y así durante 65 días que prácticamente no dormí”, recordó Mariela Giménez.

“La novela no podría haber salido de otra manera que no sea esa porque sentí el apoyo de los que estaban del otro lado y de las mujeres que acompañaban la historia, fue interesante el debate que se generaba en las 24 horas entre capítulo y capítulo. Después la novela estuvo de forma gratuita durante dos años en un blog y después vino la publicación de la editorial Tinta Libre”, indicó la escritora.

“La novela no estaba pensada para que se publicara en papel pero la gente la pidió y salió esa primera edición. El espíritu de Lucrecia fue un espacio de debate, Lucrecia no fue solo un libro sino una experiencia literaria porque pasó por tantas etapas para llegar hasta acá”, concluyó Giménez.

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