Fernando Baldarenas fue designado como director del Instituto Secundario de Chovet donde se desempeñaba como profesor de geografía desde hace 12 años.

En diálogo con El Correo, comentó su proyecto, su programa de gobierno y cuáles serán las prioridades de una gestión que ya comenzó. Calidad educativa, auto sustentabilidad y cooperativismo son algunos de los ejes centrales que intentará desarrollar el flamante directivo que acumuló un profundo consenso entre el cuerpo de docentes y el respaldo del alumnado. 

“Desde el punto de vista institucional el objetivo será lograr un colegio autosustentable. En los colegios privados – a diferencia de los públicos- tenemos que generar nuestros propios recursos, los mecanismos para poder garantizar la educación de los jóvenes en el largo plazo”.

“Contamos con una matrícula de 120 alumnos en aulas con problemas de infraestructura”, explicó.

Además, “debemos readaptar el Salón de Usos Múltiples (SUM) para transformarlo en un aula común. La inversión en los baños es inminente ya que se están sufriendo las consecuencias materiales de más de 30 años”.

Desde el punto de vista pedagógico, Baldarenas sostuvo que su gestión apuntará a “sostener la calidad educativa que la región reconoce de nuestro Instituto”.

Recuperar los vínculos entre el colegio y la sociedad será un desafío para el flamante director. Al respecto, analizó: “Existe un divorcio entre la gente y la institución que viene desde hace muchos años. Es fundamental que la comunidad sepa qué pasa en el colegio donde se educan todos los jóvenes del pueblo. Hay que mostrar lo que se hace a través de una gestión transparente, honesta y dedicada. Este será un objetivo primordial en mi gestión: la escuela debe ser del Pueblo”.

El proyecto “Una empresa, un aula” está pensado para recuperar el deterioro en la infraestructura y las intalaciones que padecieron un desgaste notorio desde hace 30 años.  “Soy de la idea del trabajo colectivo, mancomunado. Chovet es un pueblo pujante y goza de una actividad industrial que otras localidades no. Este proyecto consiste en que entre todas las fabricas logremos recuperar la infraestructura de cada aula, paso a paso, pensando en el mediano plazo”.

La cooperativa escolar “Unidos para Crecer” es fundamental para el desarrollo de la institución. Además, forma personas dentro del marco de los valores cooperativos. Según Baldarenas, “los adultos somos los responsables de transmitir los valores y principios cooperativos. No se trata de una asignatura más o de cumplir con meras formalidades. Debemos pensar una Cooperativa que tenga reales intenciones de acompañar este proceso de transformación, que sea abierta e integral a todos los alumnos y no estar apuntada a 4° y 5° año, sino a un proyecto integral”.

Por otra parte, “vamos a crear un Concejo Estudiantil que estará formado por un alumno y una alumna de cada curso, la sicopedagoga y la tutora. De esta manera tendremos conocimiento de las demandas de los chicos y un diálogo permanente”, cerró.