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Locales | 14/05/2019
14 de mayo | Día del hincha de Argentino
José, el amigo de todos

El 14 de mayo de 1995 no es una fecha más para el Club Argentino, debido a que 24 años atrás, la institución calle Buenos Aires sufriría el incendio de su antiguo gimnasio. A raíz de este triste hecho, de manera conmemorativa y representativa, los simpatizantes del club decidieron tomar la fecha como el día del hincha cuevero.

En este marco, compartimos un texto de Manuel Carreras, que habla sobre uno de sus hinchas más famosos.

José, el amigo de todos

José Galván es utilero del Club Atlético Argentino y tiene 60 años, va, eso es lo que se cree porque nadie sabe muy bien su edad. Para colmo, pasan los años y está siempre igual, siempre en el mismo lugar: el club.

José, mejor conocido como Cleto o Movi, este último impuesto por él, quien al no recordar todos los nombres que pasan por La Cueva en vez de decirle “mongui”, les dice “movi”. José es el personaje más pintoresco y querido del club. Cada socio, jugador, ex jugador, dirigente o ex dirigente no puede evitar fundirse en un abrazo o saludarlo con un afectuoso grito, que intenta devolver la generosidad y afecto que José brinda cada día.

José es la primera persona en llegar al club y, por lo general, la última en irse. Él tiene las llaves de su “casa”. Es totalmente confiable. Excelente persona. Tiene las llaves de casi todas las puertas del club, cuando alguien precisa algo de las instalaciones no duda en recurrir a él y su manojo de llaves, que es casi “tan pesado como su persona”.

Movi está vinculado con todos los deportes de la entidad, pero claramente donde más participación tiene es en el básquet. En cada partido tiene un lugar de privilegio y lo vive bien desde adentro, como si fuera el capitán del equipo, siempre atento a colaborar con sus compañeros y los adversarios en mantener la cancha seca y a los jugadores hidratados.

José es el hijo de los más grandes, el padre de los pibitos y el amigo de todos. No hay día que no se lo vea sonreír. Cuando no está se siente, aunque es casi imposible que falte al club porque su fuerza y su amor por La Cueva le curan cualquier enfermedad. Con sol o con lluvia, en pleno invierno o con cuarenta grados a la sombra, él siempre está recorriendo las instalaciones del club, tomando un café con los abuelos, jugando con los niños o renegando con los adolescentes.

Probablemente, Cleto esté en el podio de las personas del club que vivieron absolutamente todos los momentos más intensos de Argentino: la Liga Nacional de Basquet, el inolvidable paso por el Nacional de Fútbol y, también, el doloroso incendio del gimnasio, entre otras tantas experiencias.

Movi nunca mira hacia atrás ni se lamenta de lo que paso, él sólo piensa en lo que hay, en lo que tiene, en lo importante: su querido Club Atlético Argentino. Cleto es la muestra más genuina del amor que un hombre puede sentir por una institución, por su club, por La Cueva.

 

 

 

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