Locales | 12/03/2019
El león de la fuente
Sebastián Britos avanza en la reconstrucción de la escultura
Con pasión y paciencia, el artista firmatense está volviendo a la vida la pieza central de La Fuente de los Españoles, de plaza Rivadavia. Tras un hecho de vandalismo ocurrido en octubre del año pasado, a la escultura le estalló la cabeza.
En la mañana del miércoles 17 de octubre, los firmatenses se encontraron con una escena que los enojó y entristeció. El león de La Fuente de los Españoles de plaza Rivadavia había sido decapitado. Horas más tarde, se supo que durante la madrugada, desconocidos hicieron caer la escultura y la cabeza le estalló en pedazos.
Como muchos vecinos, Sebastián Britos, se enteró de la noticia por las redes sociales. Observando los comentarios, le llamó la atención que “todos criticaban, pero nadie aportaba soluciones”. Fue así que decidió correrse del lugar de la queja y asumir una responsabilidad: reparar el león.
Sabiendo que su saber de artista y de escultor eran la medicina para curar al herido, Sebastián se puso en contacto con un funcionario de la Municipalidad y le ofreció desinteresadamente, ad honorem, reconstruir la cabeza del león.
Desde entonces, en sus ratos libres, trabaja con paciencia y pasión para volver a la vida a una escultura que tiene más de cincuenta años, y cuyo mayor capital es el valor afectivo que le dan los firmatenses, quienes recuerdan haber jugado con el león y subirse sobre su espalda durante los años de infancia.
“Es una manera de devolverle a esta ciudad mucha de las cosas que me ha dado”, dijo Britos en diálogo con El Correo. Sebastián tiene 39 años y asegura que Firmat le permitió a sus padres, que vinieron desde Uruguay hace muchos años, trabajar y desarrollarse.
El escultor empezó a darle forma al león observando fotos, varias de las cuales fueron aportadas por el fotógrafo de la Cooperativa de Trabajo El Correo de Firmat, Lisandro Carrobé. Mediante el sistema prueba y error, avanzó en la obra que poco a poco va llegando a su fin.
Hasta llegar a la versión actual, Britos hizo varias cabezas, creó y desechó varias piezas. En el medio se fue interiorizando sobre la historia de la fuente y sobre el artista español que gestó este tipo de leones.
Durante la charla con este medio, Sebastián explicó que la idea no es que el león luzca como nuevo, sino que conserve la identidad que tenía antes de ser violentado.
“El león tiene que lucir bien, pero se le tienen que ver las heridas”, remarcó el artista que está haciendo renacer una escultura que es patrimonio de la ciudad y especialmente de los niños y niñas de los últimos cincuenta años.