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Policiales | 19/07/2016
Asesinato de Graciela y Mario
“No sabemos nada”
El lunes se cumplieron ocho meses del asesinato de Graciela Picech y Mario D´angelo, la joven pareja que fue encontrada sin vida, en su casa, la mañana del 18 de noviembre de 2015. “Ocho meses y no sabemos absolutamente nada. Tenemos una intriga muy grande. Estamos mal y queremos tener un poco de paz”, expresó la madre de Mario en diálogo con El Correo.
La mañana del 18 de noviembre de 2015, la ciudad se despertaba convulsionada por el asesinato de Graciela y Mario, una joven pareja que fue encontrada sin vida en su vivienda ubicada en Juan Manuel de Rosas y Aristóbulo del Valle, en barrio Carlos Casado.
    “Ocho meses y no sabemos absolutamente nada. Tenemos una intriga muy grande. Estamos mal y queremos tener un poco de paz, no se puede vivir así de esta forma, sin saber. Yo tengo todos los miedos juntos, vivo encerrada, tengo miedo porque anda un asesino suelto. No sé de dónde es, pero tengo miedo, mucho miedo”, manifestó Ana Woitovich, madre de Mario D´angelo en diálogo con El Correo.

-¿Mantienen comunicación con el Fiscal?
    -Sí, Marcelo (hermano de Mario) siempre habla con el Fiscal y yo no le quiero preguntar mucho a Marcelo porque se siente muy mal. Eran el uno para el otro. La familia de Graciela también está mal, tienen el papá enfermo y estamos todos mal…y mi marido pobre, se desahoga a su manera y lo vivimos como podemos. Carlitos (padre de Mario) ya tiene 81 años y no vivimos en paz porque él tiene miedo que yo me enferme, que me pase algo. Yo no ando bien…yo sé los hijos que tenía y que tengo, y no creo que ellos hayan hecho algo malo, ninguno de los dos, a Graciela siempre la quise como la hija mujer que no tenía. Conmigo era muy buena.

-¿Cómo enfrentaban los comentarios?
    -Los comentarios son muchos, el Fiscal nos dijo una vez, van a sentir cualquier clase de comentarios, pero yo a veces hago oídos sordos, porque si le llevás la corriente a los comentarios no vivís. No vivo ahora, porque no quiero escuchar cuando quieren hablarme algo, si no sé yo, no saben ustedes. Cuando sepa la verdad, la voy a gritar a los cuatro vientos así dejan de preguntarme. Son comentarios de toda índole, todos saben, menos nosotros.

-¿Hablan con sus abogados por  las investigaciones?
    -Sí, Marcelo habla, pero yo no le quiero preguntar porque nos ponemos mal todos, entonces alguien tiene que hacer frente a la realidad de todo esto, y yo tengo que ser una 4x4 con ellos. Qué me pasa, me voy a cualquier camino y lloro, me desahogo así porque en mi casa tengo que estar bien, pero no estoy bien, vivo medicándome. Quisiera saber la verdad, por qué motivo hicieron esto. Yo vi a mi hijo cómo estaba, abrimos la puerta y estaba golpeado, degollado, apuñalado, con los ojos mirando al cielo como pidiendo auxilio, para una madre es terrible ver eso.

-¿Han tenido algún tipo de amenaza?
    -No, gracias a dios ninguna. El otro día quisieron entrar a mi casa, eran las dos y media de la tarde y estaba sola. Quisieron abrir el garaje a los pechones y patadas. Me asomé y había un muchacho con una capucha gris y le digo: qué estás haciendo, llamo a la policía. Saco el teléfono del bolsillo, no me contestó y salió disparando.

-Si tendría al Fiscal en frente, ¿qué le diría?
    -Yo quiero saber, no tengo problemas de hablar con el Fiscal, he hablado con él muchas cosas y cosas que yo presiento. Cuando una vez hablé con él me dijo, “eso es intuición de madre”. Entendí perfectamente lo que me quiso decir, pero la intuición de madre no llega. No culpo a nadie, yo no sé, pero mi cabeza revolotea, porque Mario abrió a alguien que conocía, ahí no entraba nadie que él no conozca. Cuando abrieron la puerta ahí lo agarraron, ahí nomás cayó y Graciela en el dormitorio, y Graciela murió en las mismas condiciones que Mario. Lo único que tengo es que ya se cumplen ocho meses y no tenemos ninguna respuesta de nada. Confío en el Fiscal, pero han pasado ocho meses, ya es mucho, ya se tendría que haber sabido algo, algo real. Soy una madre que está sufriendo. Somos dos familias que estamos sufriendo por esto. Eso no fue matar a una persona porque sí, fue una masacre, eso fue una masacre, es todo lo que tengo para decir, pido justicia por todo esto, quiero saber por qué.


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