Rural | 24/11/2015
Suplemento Rural
“El agua no tiene salida”
Las continuas precipitaciones de las últimas semanas, no sólo afectaron la zona urbana de Firmat. La zona rural del distrito también sufrió anegamientos de caminos e inundaciones severas.Las continuas precipitaciones de las últimas semanas, no sólo afectaron la zona urbana de Firmat. La zona rural del distrito también sufrió anegamientos de caminos e inundaciones severas. El caso más resonante sucedió en el campo de la familia Tenaglia, ubicado sobre Ruta 93 a 1500 metros del cruce con la Ruta 33 camino a Cañada del Ucle. “Es algo que ya venimos trayendo desde hace bastante tiempo, es un campo que normalmente suele tener una laguna que no pasa la media hectárea. Pero en épocas de mucha lluvia, pasa lo que está sucediendo ahora, que el agua no tiene salida”, explicó Lidia Tenaglia.
Luego de los 93 milímetros del jueves 12, la situación de este establecimiento rural se agravó en gran medida. El agua afectó silos, galpones y la producción de la huerta orgánica. “No pretendo que me sequen el campo, pero por lo menos, no tener más daños. Las alcantarillas están tapadas de basura, de escombros y están derrumbadas. Pedimos que se limpiaran y cambiaran los tubos para que el agua saliera, no se hizo y hoy tenemos 30 hectáreas bajo agua. Hay otros vecinos que tienen 6 o 7 hectáreas de trigo y caminos bajo agua, en el caso nuestro, silos, galpones, la casa y tengo una huerta orgánica que llegó a tener 30 cm de agua, la verdura no se veía. Se está perdiendo la producción”, agregó la propietaria.
“Mi viejo me dijo, no tengo más fuerzas para seguir peleando, ya no puedo hacer más nada, lo único que puedo hacer, es mirar cómo se viene el agua y tapa todo. Te da angustia, impotencia y bronca porque no es que no tiene solución, la tiene, pero nadie hace nada, ni el gobierno de la Provincia, ni el gobierno municipal. Hace 3 años que tenemos el campo así, perdimos la cosecha de este año, la del año pasado y la del anterior”, indicó Lidia.
Un detalle importante mencionado por la familia damnificada es que cuando se construyó la Ruta 93 no se realizó el alcantarillado correspondiente. “Hasta ahora, lo único que teníamos era el funcionamiento normal de las alcantarillas de los caminos de entrada a los campos. Esas alcantarillas hacían que el agua cuando llegaba a determinado nivel, saliera y siguiera su curso normal por distintos canales”, detalló.
Seguí leyendo más en la edición impresa....